Whole kitchen en su Propuesta Dulce para el mes de Abril nos invita a preparar una tarta clásica austríaca: la Tarta Sacher.
Me
encantan las tartas de chocolate, absolutamente todas, pero la Sacher
es bastante especial para nosotros. Entre otras cosas, porque estuvimos
en Viena una semanita en Febrero del año pasado y nos trae bastantes
recuerdos. Los paseos por el centro, el arte de Klimt y Egon Schiele,
ver La Bohème en la Wiener Staatsoper, los cervatillos que nos
encontramos en nuestra visita a un cementerio nevado precioso,... y los
descansos tomando un café melange con una ración de Tarta Sacher.
La Tarta Sacher es todo un icono en Viena. Fue inventada en 1832 por Franz Sacher y su propiedad ha sido motivo de disputas legales entre la pasteleria Demel, donde el joven Sacher se formó, y el Hotel Sacher, fundado por él mismo y donde comercializó la tarta durante años. Pero todo esto podéis verlo en wikipedia y en multitud de páginas por internet. A mí siempre me hizo gracia que de la receta de una tarta pudiera armarse tanto lío, pero cuando uno va a Viena, se da cuenta del gran negocio que supone. Aunque nunca me imaginaría nada parecido aquí por ver quién posee la verdadera receta original de la paella o las croquetas, la verdad.
En Wikipedia, también, podía encontrarse la receta de Franz Sacher. Digo podía porque yo no la he encontrado, pero al menos eso dice este artículo de Gastronomia&Cía, que es de donde la hemos sacado nosotros. Hemos visto en muchas otras versiones, que se utiliza pasta de almendra o almendras molidas para hacerla, pero no en ésta que hemos elegido.
A la hora de realizar la receta, es recomendable que el chocolate sea al 70%. Tenéis que montar las claras bien, como si fuérais a hacer un merengue. Recomiendo montarlas antes del segundo paso, porque para ello es mejor si tenéis las varillas bien limpias, sin restos de yemas. Y, para rellenar, mermelada de albaricoque. Que ya si os queréis lanzar a la piscina del todo, podéis seguir nuestra receta para hacerla vosotros mismos.
Muy importante, no batir ni utilizar las varillas desde que incorporamos las claras a la mezcla para que no se bajen.
Os animo a todos a hacerla, aunque tiene varios pasos, es bastante sencilla de hacer y el resultado es increíble. ¡Yo ya la he hecho dos veces desde el sábado!
Se ve magnifica, esponjosa... una delicia
ResponderEliminarQue rica y que bien te ha quedado...bss
ResponderEliminarTe envidio!!! Y no la envidia buena... te lo aseguro!!!!!!!
ResponderEliminarPor qué tienes dos dones?? La pintura y la cocina!!!!!!!!
Es todo broma, me encanta todo lo que haces!!! Enhorabuena!
Muchos besos con cero envidia,
Belén.
bolonbombon.blogspot.com
¡Qué pinta!
ResponderEliminarMe encanta tu blog!! Que pasada los dibujos!!
ResponderEliminarUn saludo
Os ha quedado deliciosa !!
ResponderEliminarEs una tarta deliciosa, además me encanta el cartel!
ResponderEliminarChulísima la ilustración! Y la tarta también, por supuesto!:)
ResponderEliminarSaludos, Cris
Parece exquisita pero... pensaba que la sacher era la que iba rellena de mermelada de frutos rojos... aún así habrá que probarla! Felicidades una vez más!
ResponderEliminarUuuummm, que rica.
ResponderEliminarYo le tengo muchas ganas a esta tarta, pronto la voy a preparar.
Por lo pronto me llevo tu receta.
Gracias.
Un saludo.
A-D-O-R-O esta tarta y la he hecho más de una vez y de dos para cumpleaños de amigos y siempre es un éxito!
ResponderEliminarQué buena está la Sacher!!! Creo que ya os lo he dicho en alguna ocasión, me chifla el blog y hoy os he vuelto a mencionar en el mío. Un saludo!!
ResponderEliminarhttp://patosyguacamole.wordpress.com/2012/04/28/yummy-soup/
Muchísimas gracias, Marta, un placer que pienses en nosotros!
ResponderEliminarUn beso!
Una de mis recetas pendientes.Como siempre una ilustración que se sale!!
ResponderEliminarSin duda a ti, los discos te quedaron igualados, si señor...
ResponderEliminarEspero próximas recetas....
Dice110g.de azucar impalpable en las claras t otros 110 con las yemas?
ResponderEliminar